Donato Carrisi nos entrega una interesante historia llena de suspenso que por lo general, te va a dejar con ganas de leer un capítulo más. La historia comienza con una emergencia médica; un solitario hombre sufre un repentino ataque cardiaco pero el personal del hospital encargados de su atención hacen un extraño descubrimiento que desemboca en una maraña de historias entrelazadas que involucran a la policía científica italiana, la desaparición de una joven estudiante, la muerte bajo circunstancias poco claras de un periodista, una misteriosa orden de sacerdotes dedicados ha ejercer la justicia con métodos poco ortodoxos y una maraña de crímenes no resueltos pero que tienen más que ver entre sí de lo que aparentan.
Con Europa como escenario los personajes tendrán que internarse en problemas poco comunes como el tener que decidir si descubrir la verdad o no, o si el perdón es siempre el mejor camino frente a una jugosa venganza y la sed de justicia a cualquier precio.
Con Europa como escenario los personajes tendrán que internarse en problemas poco comunes como el tener que decidir si descubrir la verdad o no, o si el perdón es siempre el mejor camino frente a una jugosa venganza y la sed de justicia a cualquier precio.
El libro está narrado por horas y ocasionalmente los capítulos se remontan hasta años antes de los sucesos de la actualidad, donde salen a relucir aspectos del pasado de algunos de los personajes y que de una u otra forma llegan a atar cabos sueltos que determinan su personalidad. Esto, no representa ningún problema ya que, por la buena sincronía en la que se desarrollan los hechos, no es difícil acomodarlos correctamente hasta de manera inconsciente.
El tribunal de las almas es en mi opinión un buen libro policíaco que mezcla correctamente el suspenso, la acción, los giros en la trama y las teorías conspirativas muy a lo código da Vinci que involucran sociedades secretas, asesinatos y demás crímenes que comprometerían la reputación y sacudirían hasta los cimientos instituciones como el vaticano.